lunes, abril 25, 2011

Polillas


Cazadora no duermas de nuevo, sus alas me atormentan. Temo que salga entre las orillas de las hojas, Cazadora, este escalofrió, ese aleteo…

Los ruidos no cesan cazadora, tu duermes atenta, pero aún tengo miedo de que coman mi carne. ¿Cazadora, que escuchas?... No revises mis pastillas, no muerdas mi pelo… ¡Esta ahí, escucho su aleteo, lo escucho encerrado entre mis hojas, escapando de las memorias!

Si aletean mis ojos con ese ritmo animal, promete comerme las pestañas, una a una. Tú no dejaras que las pesadillas me hundan, me hagan suya. Promételo, promételo por mí, por vos.




Vos, yo. No encuentro la diferencia.