En Honor a Mis Nervios

Como bien dice el titulo estas "tres metáforas" van dedicada a los nervios que me pueden de manera gigante, cuando me tiembla la voz y no me salen las palabras, cuando me aprieto la mano con un gancho para estar tranquila, cuando mi mano se mueve desesperadamente... Y tato de no dejar que me ganes...

(...)

Esta lloviendo

* Bronca, angustia, agua que cae, rebota, salpica y como un Macondo infinito no deja de caer.
¿ Llegara la hora en que te equilibres?. Eres una trapecista distraída que llora sus amores.
¡Cielo deja de llorar que la ropa no se seca! (?)







Ahora es la perdición!

Deseo Hacer

Nadie Sabe Lo Que Es "INTERESANTE"

Me transforme en un ser que no quería, en una molestia detestable para ti y para mi, y todo por un error de pocos entendidos.
Tu enojo me provoca angustia. Sin poder controlarla tu viento de furia que me trae hasta mi cuarto con la idea de recapacitar, pedir perdones verdaderos que no serán nunca desperdicios de gente olvidadiza.
Comprendo lo que fue para los dos, pero ahora te pido que me comprendas lo que es hoy para mi enfrentarme a mis acciones y no poder acabar con esta culpa infinita, agonizante, dolorosa.

Al silencio no le gusta ser callado por frases que no nazcan del corazón, por eso quiero que sea importante para ambos, para dejar mi llanto abandonado, poder mirarte a los ojos y que entiendas cuanto te necesito: Perdóname, me equivoque.


Esperare tu disculpa o tu negación ...








Lamentablemente estoy que exploto y no se para que dirección

Quiero tu Condenado Anhelo

Ojos Abiertos, Sueños Cerrados

El día miércoles 12 de abril , del año que olvide con exactitud a la hora de sentarme a tomar la merienda junto con mi madre, vi una mirada detenerse frente el vidrio que separa la realidad de una insignificante viento frió. Era la siesta ,justo cuando es imposible hacer ruidos que no dejen dormir aunque falten 6 minutos para despertar.
Las angustias guardadas tras años de espera comenzaron a brotar seguida por una fina lluvia, que intentaba ser menos que lluvia y mas que dolor. Fue enseguida que los grandes arboles verdes que se encontraban frente mi presencia comenzaron a inclinar sus hojas de lado a lado. Mi mamá miró mis ojos atónitos y trató de llamarme la atención:
- Es como dice tu abuela: Le tenes que enseñar para que aprenda.
- ... Yo no puedo aprender ni aprehender-. Le conteste insegura de mis palabras, simplemente tratando de que no notara mi visita a la luna.- Estoy tomando el té.
- ¿ Ahora que vas a hacer?
- Vengo esperando mas de dos siglos para aprehenderlo, otro siglo no me hace mal.

... Son kilos de amor preso ...


s o l a s o l a s o l a s o l a s o l a s o l a s o l a s o l a s o l a ... No me hagas dudar!

Payasito